En 1915, el barman principal del Long Bar era un isleño de Hainan llamado Ngiam Tong Boon. Y tuvo una idea. ¿Qué pasaría si preparaba un cóctel que pareciera un ponche de fruta inocuo que combinaba con el tono rosado de las mejillas de las señoras, pero tenía el toque secreto de un gin sling? ¡Las mujeres podrían beberlo sin problemas! Después de experimentar con varios ingredientes, Ngiam perfeccionó lo que se terminó conociendo como Singapore Sling.

El resto ya forma parte de la historia de la mixología: más de un siglo después, la creación de Ngiam, o más precisamente, una versión de su creación, ya que el Singapore Sling de hoy se diferencia un poco de la receta original de Ngiam, se reproduce en bares y restaurantes de todo el mundo. Cada vez que se inaugura un nuevo hotel Raffles, se reinventa el Sling (a continuación) con una nueva receta local como tributo. 
 

Muchas figuras conocidas han dado su visto bueno al Singapore Sling a lo largo de las décadas, incluido el periodista Hunter S Thomson, quien hizo referencia al cóctel “con mezcal de acompañamiento” en su trabajo seminal de 1971, Fear and Loathing en Las Vegas. La referencia (menos el mescal) llegó a la adaptación cinematográfica del libro en 1998, protagonizada por Johnny Depp y Benicio del Toro, que le dieron al Singapore Sling una nueva imagen genial, sin mencionar la creación de una gran cantidad de publicaciones en redes sociales que muestran cómo preparar ‘el Singapore Sling de la película Fear and Loathing in Las Vegas’. 
 
Lamentablemente, Ngiam Tong Boon no tuvo mucho tiempo para saborear su éxito, ya que falleció más tarde ese mismo año. Sin duda, se habría sentido orgulloso de su legado, sobre todo porque su creación ahora es un faro de conciencia ecológica: las pajillas que acompañan a un Sling en Raffles Hotel Singapore están hechas de almidón de papa inocuo para el medioambiente y, por cada 25 Slings vendidos, el hotel planta un árbol en la selva tropical de Sumatra o Kalimantan.